Tener las cosas claras

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Tener las cosas claras
2
Tener las cosas claras es saber que, a veces y
sin despreciar a otros, aunque esté muy cerca de
equivocarme, merezco descubrir a través de mi
victoria o mi derrota si me he equivocado.
3
Tener las cosas claras es pensar que, en el
camino hacia lo que deseo en mi vida, veré
aquellos obstáculos que necesito franquear, pero
quizá no vea los puentes que me tienden para
sortear las dificultades, y aún así sabré que es
bueno seguir caminando por si un día los descubro.
4
Tener las cosas claras es dudar, es cuestionarme
los problemas, comprender que las cosas podrían
haberse solucionado de otra forma, pero hacerlo
con la cabeza templada y el corazón dispuesto a
pasar una nueva página y soltar las ataduras del
pasado.
5
Tener las cosas claras es mirar de frente con
dignidad, saber que aunque vea nubes, incluso
aunque llueva, encontraré después de una tormenta
el arco iris en el que hacer renacer mis
ilusiones.
6
Tener las cosas claras, es soñar, elevar al cielo
mis deseos sabiendo que regresarán envueltos en
aires de certeza y no en nubes de fantasía.
7
Es alimentar día a día mi esperanza sabiendo que
cuando me invada el desaliento sé muy bien a
quienes puedo acudir para retomar fuerzas, y de
quienes debo alejarme.
8
Pero sobre todo, tener las cosas claras es
comprender, que si alguna de mis palabras de ayer
te hundió y llegue hoy a conmoverte, ninguna de
ellas te hará ponerte en pie, ninguna tomará por
ti las riendas, ni las decisiones que necesites
tomar en tu vida para seguir avanzando.